Las medidas de distanciamiento social y aislamiento para combatir la pandemia de COVID-19 han cambiado las reglas del juego y modificado la vida de los consumidores. Ya pasaron más de 130 días de cuarentena y la nueva normalidad parece asentarse mientras es asimilada poco a poco. Los especialistas de Thinking with Google, comparten pequeños insights que nos ayudan a comprender mejor los nuevos comportamientos del consumidor, y a adaptarnos al cambio que redefine el modo en el que experimentan y satisfacen sus necesidades.

Tiempo y espacio

El tiempo, que antes parecía no alcanzarnos para realizar todas nuestras actividades fuera de casa, ahora se congela en nuestras manos. A raíz del aislamiento, ahora veamos las manecillas del reloj pasar, perdiendo la noción de los días y las horas, como si cayéramos en un agujero de conejo. El aburrimiento y la ansiedad de un futuro incierto se han instalado en nuestro sillón, lo cual ha llevado a los consumidores a encontrar formas diferentes de ocupar su tiempo de manera productiva, creando nuevas estructuras para seguir realizando sus actividades diarias, y así sentirse tranquilos.

Espacios en el hogar que eran exclusivos para una actividad, se han transformado en lugares multipropósitos. Por la mañana son oficina o escuela, por la tarde, gimnasio y en las noches se convierten en sala de cine. El confinamiento enfrenta cara a cara a los consumidores con el desafío de mantener el orden y sentirse cómodos a la vez que reinventan su vida y su casa para la nueva normalidad.

Trabajo y ocio

Nuestro nuevo ritmo de vida, a desdibujado la línea que separa el trabajo del hogar. Las industrias, grandes y pequeñas, así como los trabajadores buscan adaptarse, ser previsores y proteger su productividad, sin descuidar el contacto humano. Aplicaciones como Zoom o Google Meet nos mantienen acompañados en la soledad. Es momento de apostar por la formación de los equipos de trabajo en materia digital, haciendo una transición y planificando el home office a un período más largo.

Ya que viajar a otros destinos es todavía es muy complicado y no se recomienda, las experiencias digitales han llenado el deseo de visitar y explorar otros puntos turísticos. Búsquedas como “visita virtual” o “museo virtual” encabezan la lista en países latinoamericanos. Además se observa una tendencia de los consumidores por realizar actividades lentas y tradiciones, como aprender una nueva habilidad, cocinar o armar rompecabezas, y un mayor interés en actividades para hacer ellos mismos, como teñir ropa con técnicas de Tie-Dye.

Salud mental y los demás

Los consumidores están priorizando su salud física y mental sobre sus compras o demás actividades para lidiar con la ansiedad y el estrés que el aislamiento puede ocasionar. Es momento ideal para que tu marca cambie su discurso hacia el bienestar emocional dándole al consumidor una sensación de paz. Puedes agregar tu producto o servicio a una rutina de cuidado personal que le dará un valor agregado que encontrarán de gran utilidad.

La necesidad de conexión es más importante que nunca. Tus consumidores buscan entablar relaciones y conversaciones no solo con sus amigos y familiares, sino también con una comunidad global. Como marca, permíteles compartir sus experiencias en soledad, crea contenidos que generen interacción entre las comunidades online y que incentive el diálogo desde casa.

Finanzas y gastos

Muchos consumidores se vieron afectados en su situación financiera debido a la pandemia, y han decidido destinar sus gastos a sus necesidades inmediatas así como a proteger el futuro de su economía. Esto incluye pagos cómo: renta, artículos esenciales, transacciones, pagos digitales e inversiones. El reto de las marcas en materia financiera, es interactuar con el consumidor sin ser interpretado como ventajista.

Para las marcas es un buen momento para empatizar con las personas en situación de vulnerabilidad, generando comunidad en las maneras de colaborar con ellos. Los centros de atención vía telefónica o chat son el mejor aliado para aquellos consumidores que no se sienten preparados para volver a interactuar personalmente, de esta manera tu marca podrá darles atención y asesoría.

Ser una marca en un tiempo donde lo único constante es el cambio, es un gran reto. Las industrias creativas debemos replantear lo que estamos haciendo y preguntarnos: “¿mi estrategia está enfocada a las nuevas necesidades del consumidor?” Nosotros tenemos que seguir buscando la adaptación para asistir a nuestros clientes ante una situación compleja, y ayudarlos a entender mejor a este nuevo consumidor. Como expresa, Charles Darwin: “No sobrevive la especie más fuerte, ni la más inteligente, sino la que responde mejor al cambio.”