Pocas charlas hemos disfrutado tanto como la de Yuri Alvarado, una auténtica “bestia” de la publicidad. ¿Quién no recuerda aquel anuncio de Aeroméxico donde 22 monjitas disputaban un aguerrido partido de futbol en dicha sea (literal) santa sede)? Y es que con cada una de sus campañas, Yuri Alvarado, cofundador de Alvarado Molina, demuestra que en este mundo de la publicidad lo importante ha sido, es y será LA IDEA.


Unos piensan que la publicidad es el cáncer del siglo XX, otros que es un mal necesario y los más radicales que es un instrumento abominable. La realidad es que es un negocio de millones de dólares y hay que saber hacerlo. Y para hacerlo bien vale la pena escuchar lo que un personaje como Alvarado tiene que decir. Por eso aquí te dejamos las 15 máximas de la Bestia:

1. Este será mientras exista el negocio de la creatividad

Ser creativo no sólo es un trabajo, es una actitud ante la vida.


2. Confía en tu instinto

Sé, vive tu idea y sobre todo cree en ella.

“Cuando hay una gran idea y la gente cree en ella, a todos les va bien.”


3. Las ideas son líquidas

Las ideas deben ser capaces de viajar a través de los diversos puntos de contacto. Deben tomar la forma de cada canal pero siempre conservando la misma idea y la misma historia.


4. Hablarás con personas, no con targets

Esto ya lo hemos repetido muchas veces, pero igual sigue siendo útil: Conoce profundamente a tu audiencia.


5. La publicidad es un deporte de conjunto

Hay que ser talentoso y trabajar en equipo. No sirve de nada ser talentoso y trabajar solo, sin embargo, hay que organizar el trabajo en equipo: definir roles, establecer reglas, tener ideales comunes, así como dar y recibir.


6. Observar es un superpoder

¿Cómo vas a conocer a tu cliente, a tu consumidor si no lo observas? Es así como puedes obtener los insights más poderosos, los cuales se pueden transformar en IDEAS.


7. El tamaño de la idea no depende del presupuesto

No importa qué tan simple sea la ejecución, si la idea es buena, no se necesitan fuegos artificiales para que sobresalga y cumpla con el objetivo.


8. Aprender a definir conceptos visualmente

Los diseños muy complicados no son necesarios a la hora de transmitir una idea poderosa. Hay que ser concreto y aprovechar el potencial visual tanto de la marca como del producto.


9. No hay que ir como Heidi por la pradera

Este es un negocio lleno de tiburones y siempre estamos a un email o a una llamada de perder un proyecto o una cuenta completa. Siempre hay que buscar la excelencia porque tu cliente y tus cuentas las quieren no sólo una agencia sino 10.


10. Nunca es acerca de los productos, siempre es acerca de las causas y de las personas

Queda mucho más claro cuando trabajar con y por causas sociales; no es la donación como tal, es la historia que contamos para motivar la acción, a quiénes impactamos, a quién ayudamos y cuál es el cambio que generamos.


11. Comprométete, no basta con que involucres

Tiene que significar algo para ti y tienes que estar ahí con tu mente y tus cinco sentidos, no basta sólo con incluir tu nombre en el proyecto y hacer lo que te toca.


12. Sé anecdótico

Busca en tu propio acervo de experiancias ya que no sólo son auténticas, sino que es más fácil que la gente se identifique con ellas.

“Las historias se ven mejor en pantalla”.

13. Apuéstale a algo siempre

A una emoción, al humor (sólo si vas a ir hasta el fondo), a la imagen, a los clichés o a la locura. A lo que prefieras, pero apuéstale a algo.


14. Del negocio de la comunicación a la comunicación como negocio

Aprovecha todo el potencial de esta disciplina, sácale provecho, y en palabras de Alvarado, por qué no, se tu propio cliente.


15. No olvides la anécdota del clavo

No hay que quedarse con lo aparente, hay que ir hasta el fondo para saber exactamente qué es lo que nuestro cliente y sus clientes necesitan.


Con más de 300 premios publicitarios y 30 años de experiencia, Alvarado sabe que este oficio no es tan fácil como algunos pretenden que sea, sino todo lo contrario. Y aún así, “es una pasión difícil de explicar e imposible de entender”. Es un negocio de ideas, que al fin y al cabo, en cualquier ámbito posible, son las que mueven al mundo.